Los cambios de temperatura extremos pueden agrietar la arcilla.
Evite verter líquidos calientes cuando la olla está fría y viceversa.
Luego de cocinar, coloque la olla sobre un soporte para platos calientes o sobre una tabla de madera.
No lave caliente la olla, espere a que enfríe.
No someter al fuego con alimentos congelados, ponerlos a descongelar primero.
No colocar fría la olla en un horno caliente o viceversa. Deben calentarse juntos.